viernes, 10 de septiembre de 2010

La vuelta de las vacaciones

Durante las vacaciones Jacinto Varela un conocido coleccionador de grillos acróbatas me dijo: "los patroness noss han arreglado de antemano un descanso para que despuess podamoss seguir laburando para elloss con más fuerza. Así  pueden comprarse nuevass propiedadess que solo compartirán con nosotross  cuando precisen que alguien less lave los bañoss. Así son de buenoss loss patroness."



Y son en esos momentos locos de las vacaciones que el sol nos calienta el cerebelo, y un chorrito de baba nos corre por las comisuras. Y dejamos de hacer. Y oímos menos, vemos borroso y comemos hasta que algo que no es precisamente nuestro espíritu gana peso.
La bonanza de no hacer solo es comparable a esos momentos de euforia donde incontrolablemente felices podríamos hacer detonar una bomba atómica y mirar el humito por satélite. Sin maldad, apenas para apreciar la coreografía de las partículas de una ciudad hecha literalmente polvo.
Algún ingenioso impuso que a la época de vacaciones se le llama "silly season" en un obligatorio inglés para demostrar que una pelotudez universalista nos hermana, sin importar raza, credo o religión.
En contraposición durante el resto del año siempre espero la "smart season" o la "creative season", pero por alguna neurosis de la Naturaleza nunca llega.
Juan Varela me dijo también: "La propagación de la idiotezz no ess natural, ess un proceso orquestado desde el principio de loss tiemposs.
Alguien se beneficia y no ess precisamente la sociedad. Quedémonoss musa que todavía hay sol y parece que noss está mirando"

Buenas noches